Reseñas
El lugar es pequeño, pero se está muy cómodo. La atención es muy buena y servicial, la comida es muy rica, comimos 1/2 tabla de quesos 1/2 porción de croquetas y 1/2 chipirones a la plancha con esto más 2 copas de vino y 1 agua cenamos 2. Al pedir la cuenta nos trajeron de cortesía licor de Orujo
Local no muy grande, con mesas altas en la entrada y al fondo mesitas para un aforo de unas 30 personas. Llegamos para cenar algo, y por suerte encontramos sitio. Nos atendieron muy rápido, personal muy amable y predispuesto a facilitar una buena estancia. Pedimos varios platos, que por precio y tamaño está bastante bien. Tienen raciones y 1/2 raciones y en ensaladas grande o pequeña. Luego carta de sugerencias. Cenamos bastante bien, incluso tuvieron un detalle bonito con mi hijo al hacerle un dibujo de sirope en su tarta autor: Gustavo Un grato descubrimiento.
Sitio recomendado para probar distintos platos. El personal atento y correcto. El pulpo guay. La paella de marisco buena pero tenía un poco de arena en la almeja. Por lo demás. Recomendable
El ambiente es animado y el servicio atento. Los platos saben bien, las raciones son generosas y la comida es muy agradable. Especialmente las patatas fritas con bistec son las mejores que he probado en mi vida. ¡La sangría también es genial!
Un lugar súper agradable. Te atienden rapidísimo, y el ambiente está muy bueno. Pidan las empanadas, están muy ricas aunque el detalle de la lechuga está de más. Los buenos rotos con jamón son de los mejores que probé en Madrid.
Muy agradable lugar, el servicio impecable. Los alimentos de muy buen sabor, recomiendo la empanada de carne! Y las patatas picantes si pican pero poco. La sangria estaba deliciosa. Al finalizar tus alimentos te regalan un digestivo de lo mas delicioso. Baños limpios, instalaciones un poco incomodas porque no hay respaldos en todas las sillas, por lo demas exclente
Comida local muy bien preparada, en un lugar autóctono pero poco concurrido. Una buena atención, tragos muy bien preparados y una comida local con buena sazón. Una joya reservada para quien busque una experiencia local.
Local pequeño pero acogedor. Muy buen servicio, muy simpáticos y pendientes de todo. Fuimos a cenar de picoteo porque no teníamos mucha hambre. Pedimos las patatas bravas, las croquetas y el pulpo, y la verdad que todo estaba muy bueno.
Un pedacito de cielo en Madrid. La comida, los empleados y el ambiente hicieron de esta visita una experiencia única. La paella de mariscos estaba fenomenal. Sin duda un lugar que no te puedes perder cuando vengas a Madrid. A small piece of heaven in Madrid. The food, the employees and the atmosphere made this visit a unique experience. The seafood paella was phenomenal. Definitely a place that you cannot miss when you come to Madrid.
Sitio bastante lleno con ambiente internacional. Nos dejaron esperar dentro en una mesita alta hasta que se liberó nuestra mesa. Los camareros muy atentos. Recomiendo la ropa vieja y la sangría, pese a ser uno de los productos estrella no nos encantó estaba bastante fuerte