Reseñas
@mariscos_emilio , en Sevilla. Almejas, coquinas, pulpo, salmonetes y tantas otras delicias del mar son su especialidad. También su ensaladilla de gambas me ha encantado. Y el langostino de Sanlúcar, que no tuve ocasión de probar en esta ciudad gaditana donde es religión. Muy característico en crudo por sus tonos azulados de la cola. Y muy fácil de cocer. Se echan en agua hirviendo hasta que el langostino flota, señal de que están cocidos. Se pasan a un barreño con agua, sal y mucho hielo, hasta que enfríen. El langostino se contrae y toma la sal necesaria en la salmuera. He de decir que este tipo de crustáceos me gustan mas a la plancha, donde creo que se les realza mucho más el sabor. Sígueme en Instagram: @gastrotip
Hemos ido 4 amigas para pasar unos días en Sevilla, y hemos caído en este restaurante, La atención por parte del camarero ha sido TAN PÉSIMA, que pensando en quedarnos a comer, nos hemos ido, ni una palabra, ni una recomendación, vamos, que no esperábamos que nos hiciera la ola, pero un “hola, que quieren tomar” simplemente, por educación… pues ni eso, y del adiós, ni comentamos. Así que… es lo que podemos decir. Se nos han atragantado hasta los vinos, de lo incómodas que nos hemos sentido
Bueno ir un lunes a una marisquería no es lo más acertado, así que la valoración sobre la Carta mejor otro día, lo que pedimos estaba bueno. Sin embargo el estado de conservación del restaurante es pésimo, especialmente los servicios destacando la suciedad y la falta de papel higiénico. Elementos que siempre son importantes pero en esta época más aún. Exceso de mesas te tocas con el comensal de la mesa del al lado. Si tenemos en cuenta que los precios son algo elevados, esperas algo más.
Buen restaurante , aunque la famosa ensaladilla de gambas y patatas llevaba demasiadaaaaaaaaa mayonesaa y claro luego nos sento mal.. por lo demas todo bien , pagamos 235€ 4 personas y nos regalaron el postre
Buenos mariscos y pescados a un precio razonable. No conviene perderse la ensaladilla de gambas.
Las tapas exquisitas. Quizás la cantidad un poco pequeña pero de sabor excelentes.
Ubicado en calle Génova junto al puente de los remedios. La ensaladilla es simplemente exquisita. La ventresca de bonito también, para mi es parada obligatoria en Sevilla
El camarero lo más borde que te puedes encontrar, la atención pésima. Las tapas pequeñas no, lo siguiente, te ponen patatas de bolsa y un trozo minúsculo de carrillada, bacalao etc. La copa de vino 6 euros cada copa y no ha llegado ni a poner dos dedos. En fin huir de este sitio porque en Sevilla cualquier sitio es mejor que este. Timo total
Gran calidad en la comida , el servicio inmejorable, el trato exquisito, recomendable 100 por 100
Comida buena aún que un poco cara para mi gusto Lo peor, sin duda, el trato de los camareros. Seis camareros para ocho personas y parece que les molesta que yo les pida una ración. Me han hecho sentir como que no pudiera pagar lo que he pedido, creyéndose superiores. Nunca volvería a no ser que cambien los camareros.