Reseñas
Esta mañana decidí entrar en la Chicha Yeyé para tomar un cafelito. Las camareras son amables y diligentes. El salón, con una decoración muy al estilo de los 60 como no podía ser de otra forma por el nombre del establecimiento, es espacioso y acogedor. Cuenta con una terraza junto al monumento más representativo de El Puerto de Santa María Castillo de San Marcos. En cuanto al café, excelente. Aunque hoy no había, recomiendo también la tarta de zanahoria exquisita. En definitiva, seguiré disfrutando de su café y tartas tantas veces como pueda.
Conocí este lugar en verano de 2020 y tanto a mi como a mi amiga, nos encantó, hoy he vuelto a pasar por El Puerto y me apeteció repetir la experiencia. Lamentablemente el servicio recibido no ha sido tan bueno. La calidad de los desayunos sigue siendo excelente, pero los camareros están un poco despistados. Entre otras cosas, nos ofrecieron solo 3 opciones de desayuno, las 3 tostadas, pensé que habrían reducido su carta, pero luego vi a otros clientes pedir otras cosas que no nos habían ofrecido. Espero que haya sido algo puntual y que en mi próxima visita, mi experiencia sea como la primera vez.
Un lugar muy peculiar en el centro del Puerto, decorado como en los 60, muy acogedor. Fuimos por probar un lugar diferente con desayunos alternativos al tipico mollete con jamon y dimos en el clavo. El precio está un poco por encima de la media, pero hay que decir que tienen una gran variedad de panes centeno, de campo, con semillas, integrales, molletes... y de ingredientes con los que combinar nuestro pan. La taza de café es de un buen tamaño y cumplió mis expectativas en cuanto sabor. Repetiremos para probar el resto de panes y de tartas.
Un bar singular, donde desayunar, merendar o tomar una copa. Ambiente muy agradable, tranquilo, decoración de los años 60 y buena ubicación en el centro del Puerto. Café de calidad, buena repostería y una atención personal que es digna de agradecer.
El sitio está muy bien pero la atención no ha sido muy agradable, las camareras un poco perdidas y abrazándose cuando estábamos esperando a pedirle la cuenta. El desayuno sin más para el precio que tiene. Entiendo que está en el centro y el sitio hay que pagarlo. No estuvo mal pero un poco sin más. La decoración del bar es muy bonita.
El desayuno esta rico, las camareras van un poco perdidas y la barra y mesa anexa repleta de platos y vasos sucios es un lamenta espectáculo.
No me extraña que tenga tantos comentarios positivos. Es un lugar bastante agradable, sobre todo la terraza con buen tiempo. El desayuno es muy bueno, desde el agradable sabor del café hasta el crujiente de los molletes. Si además le añades un trato genial y amable por parte de sus empleados, se convierte en un lugar indispensable donde recargar fuerzas. Muy recomendable.
Sitio justo al lado del castillo, por dentro es como un bar antiguo y por fuera tiene sus terracita. El desayuno me pareció bueno, tomamos las tostadas francesas que tenían fuera de carta. Muy buenas tanto la dulce como la salada. La mimosa me gustó menos, podría venir mejor presentada. El café tardaron mucho en servirlo. El servicio fue correcto, aunque algo despistados, y ruidosos entre ellos. De precio tirando a alto. Me gustó el ambientillo con la música flamenca navideña de fondo.
Café bueno y tarta rica aunque muy seca, poca limpieza del local y muy deteriorado por dentro, añadiendo la poca limpieza de sus mesas y silla. Personal muy perdido cuando te atiende .
Nosotros preferimos venir a tomar el café y postre a este lugar. Los bizcochos caseros están buenísimos. En la terraza se está muy tranquilo y acabas tomándote una copa. Calidad-precio, 100% recomendable.