Reseñas
Para tapear y tomarse algo tranquilamente está muy bien, calidad/precio razonables y local bastante amplio.
Como ya han dicho, sitio con terraza amplia, precios baratos y platos para picar algo sin pretensiones. El camarero Alejandro, muy atento y despierto. En cambio el otro día estaba otro que, como estaba atendiendo a una mesa grande, nos dijo que en ese momento "no le venía bien" atendernos. Espero que fuera algo puntual debido a que se vio desbordado aquel día. En ninguno de los baños había jabón.
No está mal , cañas baratas es un bar absequible . Las tapas deberían quizás ajustarse a un menor precio , pero hay cosas guay como perritos . Pero está orientado para la chavuleria , al final a los bares así pues quien acude siempre es el público joven en este caso adolescente Pero vamos que pa echar unas cervezas pa que mas
Sería un sitio para estar super agusto tomando algo si no fuera por la falta de personal. Con la terraza, los precios y la carta que tienen debería estar siempre lleno, pero al no haber más que 1 persona para todo es imposible.
Bar para gente joven, precio barato y sin pretensiones, si buscas algo elaborado para tapear o cenar, este no es tu sitio.. Tienes q pedir tu la consumición, no hay servicio de terrazas. Cero medidas covid en las mesas, nadie las limpia ni revisa número de clientes por mesa.
Lo único bueno es precio, pero después de ahí no na hay nada bueno. Pedí ración de bravas las patatas son congeladas y malas al igual que las salsas de bote y malas, también pedí unas tiras de pollo que son congelas a base de papilla de pollo y con alguna cosa dura por dentro. Es la primera vez que paro ahí y la última, no es un problema de personal sino de concepto comida barata y mala no es un sitio para ser cliente habitual sino para despistados como yo en esta ocasión. Suerte y mejorar
Uno de los camareros bastante borde, otro de prácticas debería soltarse más con los clientes al hablar y el que traía los platos muy majete. Las cervezas no las conoce nadie pero bueno. No se cómo responder, asi que edito la reseña, pero el camarero era sudamericano, al de prácticas no tengo ninguna queja, simplemente era eso y me parece bien que le den esa oportunidad. Un saludo
Lamentable experiencia, desde el minuto cero. 22.30 del sábado, pido mesa en terraza para cenar 7 comensales más un carrito de bebé. Pues bien, después de esperar que el encargado de terraza dejará de recoger varias mesas pues la terraza estaba bastante vacía.... Recuerdo a las 10.30 pm..., nos pone dos mesas para los siete con el carrito, totalmente pegados. Le pedimos por favor que si nos añade una mesa puesto que si vamos a cenar queremos estar más cómodos, y sorprendentemente nos dice que NO, que para siete personas más carrito nos pongamos en dos que es más que suficiente se ve que el "camarero" de protocolo y restauración es un profesional tiene muchos máster. Automáticamente nos hemos dado la vuelta y nos hemos ido. No entiendo como trabajadores así son contratados, es justo lo contrario a dar un buen servicio. Espero por el bien del negocio sepan cómo trabaja este "señor".
Un sitio un poco decepcionante, precios normales de cualquier bar si tienes en cuenta que en otro sitio te suelen poner tapas con la consumición y aquí la tapa va a parte, para colmo al servirnos una cerveza y un refresco, según nos sirven nos dicen que son 3,10 para pagar en el acto sin saber si vamos a pedir más, a las mesas de alrededor sin embargo las sirven sin pedirles el pago, le pedimos una tapa de 1€ que tienen anunciada y nos dicen que son aceitunas... Pedimos una tapa de patatas alioli por 1,40€ que son incomibles. No lo recomiendo, lleva poco en el barrio y no durará mucho.
Hice un pedido a través de una aplicación de comida a domicilio y la comida estaba muy buena, sin pretensiones, pero exactamente lo que prometen. Además los precios son muy competitivos. Repetiré sin ninguna duda