Reseñas
Local de comida andaluza, nada reseñable excepto su ubicación. No me gusto, a modo de cortesía nos sirvieron un guiso de verdinas que estaba con gusto a quemado, supongo que se les pegaría en la olla. La ensaladilla rusa lleva camarones pequeñitos que realmente no le aporta porque no están bien integrados. La lengua escabechada si estaba rica, el cazón frito bien rebozado pero falto de gracia. Los chipirones con huevo estaban buenos. El servicio de pan pésimo los trozos cortados que parecía que lo hubiesen partido con la mano. El postre que en este caso era piña, tampoco estaba conseguido. No, no me convenció en absoluto. Por ese precio hay mejores restaurantes
Comida de gran calidad, precios medios al nivel de la calidad de la comida, servicio muy amable aunque algo lento fuimos algo tarde, sobre las 22:30
Si bien el sitio es original y bonito estilo casa andaluza, tenía unas espectativas altas pero no me llegó a convencer. De lo que comí os recomiendo el adobo y el pescado. El postre de manzana asada estaba rico. No está mal el sitio pero no creo que repita.
Local agradable y pintoresco, con varias zonas divididas que pueden ser ideales para grupos. Aunque el baño me pareció un desastre, estaba sucio y muy descuidado, con algunos desperfectos incluso. La atención fue buena, la camarera era bastante amable. La comida me pareció algo simple, muy normalita y demasiado cara para lo que era. Creo que sobre el papel los platos tienen mejor pinta, pero luego, al menos yo, no percibí tanta elaboración ni tantos sabores en cada plato. Para dos personas pedimos tres platos de la carta, dos croquetas y agua para beber y nos costó algo más de 60€. No lo recomendaría, ya que me parece caro, hay sitios por la zona de calidad similar o mejor y mucho más económicos.
Restaurante que cuida hasta el más mínimo detalle para tener ese aire del sur, tan bonito. Desde la decoración blanca con madera azul, la carta hasta llegar a sus camareros, que no se si serán del sur o no, pero tienen mucho arte. Fui en pareja a cenar y la verdad que nos sentimos como en casa, la comida es de 10 y los camareros están siempre dispuesto a ayudar, asesorarte y aconsejarte, conocedores de su carta, tanto de comida como de bebida. Volveré sin duda
Volvimos después de mucho tiempo y muy por debajo de las expectativas. La calidad de la materia prima mejorable, el servicio aunque amable eterno y eso que llegamos con reserva a la 13:00 cuando no había nadie y los platos con exceso de sal innecesario el bienmesabe y la parrillada difíciles de comer. Los platos fuera de carta dorada y lomo con precios exorbitados por la calidad del producto. En resumen, mal. Por nuestra experiencia, no merece la pena teniendo en cuenta las opciones en los alrededores. Adecuado para niños: Sin problemas. Lo malo es que solo hay una trona y la espera es demasiado larga Accesibilidad para sillas de ruedas: Hay una planta baja a la que se accede por dos escalones, pero en la primera es imposible y los baños está en el sótano.
Hemos comido allí hoy y nos ha encantado. Una carne exquisita, flamenquines de los de verdad, unos chipirones exquisitos.. todo buenísimo y el trato genial también. Íbamos con 5 niños y muy atentos con ellos, cosa que tampoco es muy habitual. Volveremos.
Tienen una buena ensaladilla rusa, unos decentes y contundentes chipirores rebozados con huevos fritos, aconsejables. Eso sí la atención ha sido de lo mas extraña, creo que no tenian un buen día, a todos nos puede pasar Aconsejo las.mesas de interior del restaurante la plaza es muy abierta y si da el sol puede hacer.mucho calor y arena. Dentro buena decoración y sensación de tranquilidad. Tienen una buena carta de vinos y algún plato que suena muy original.
Descubriendo la agradable terraza de la nueva localización, en la plaza de la paja, de @lamalaje_ , con @manumalaje a los mandos. - Solomillo al oloroso con trufa Atún Albacora con salmorejo Navajas al curry verde Chipiron relleno de langostinos con salsa de menudillo Tortellini de berza con queso galmesano Helado de alfajor Para beber blancos, tintos, cositas nuevas, ediciones limitadas, ... una fiesta! - Siempre una grande y completa experiencia, diferente, mucha cocina, y sabores del sur.
Hace muchos años que sigo la cocina del chef Manu Urbano, desde los tiempos en los que cocinaba en Sacha. Quiso montar su propio restaurante y le acompañó en la aventura mi amigo Aaron Guerrero y su hermano Mesala. Poco a poco Manu fue implantando su cocina sureña, haciendo honor a su Córdoba natal, en el centro de Madrid. Hace muy poco se han mudado a la castiza Plaza de la Paja de Madrid y siguen creciendo, ahora con terraza y con un local mucho más acogedor para que pueda lucir como se merece la cocina de Manu. Platos que no te dejan indiferente como los berberechos, curry verde de amontillado y café, los boquerones los borda, los escabeches... todo está rico en la Malaje y todavía no están con los precios disparados por lo que se está convirtiendo en uno de los mejores restaurantes de Madrid calidad/precio...