Sr. Ito

Lugar muy bonito, es pequeño pero con un ambiente tranquilo, acogedor y buen servicio por parte de los camareros. La comida es exquisita, tienen platos modernos y con raciones pequeñas para picotear y probar distintas cosas de la carta. Sin duda es un lugar que merece la pena ser conocido.Comida: 5/5

El restaurante Señorito de la calle Pelayo es un buen lugar para cenar, con platos muy visuales y sabores típicos de la cocina japonesa de fusión. El servicio es amable. El local tiene dos plantas. El precio es un poco elevado en comparación con restaurantes de carta y productos similares. Una buena experiencia.

Muy bueno para el precio y ubicación que tiene. Servicio muy rápido y atento. El único pero, y lo pongo porque me hizo más gracia que otra cosa, es que la puerta de la cocina no se terminaba de cerrar en ningún momento y si eres un poco maniátic@ puede ponerte de los nervios . Por el resto, muy recomendable

Buen sitio de comida japonesa-fusión. Servicio rápido en un local pequeño y de decoración coqueta. Buena relación calidad-precio en pleno Chueca. Con la bebida ponen un pequeño aperitivo La calidad de la comida es realmente buena y la combinación de los sabores que ofrecen en su carta es una maravilla para los que disfruten comiendo y probando nuevas cosas

El sitio acogedor y tranquilo. El trato muy bueno. Respecto a la comida decir que estaba increíble. El aperitivo de hummus buenisimo Pedimos pan bao relleno de rabo de toro y estaba espectacular si vais pedirlo , al igual que las gyozas de rabo de toro con trufa y huevo. También pedimos sushi variado, makis de langostino, gilda y aguacate que estaban espectaculares aunque picaban un pelin y california roll de aguacate, queso y miel buenísimos . De postre pedimos brownie con helado de sesamo y mochis. Nos quedamos llenos, pero si es verdad que es caro para la cantidad de las raciones, por ejemplos los 8 makis que pedimos salían 16€. La presentación de los platos maravilloso

Estaba todo muy rico y cuidado. Aunque eso sí, concepto bocaditos. La carta es extensa, por lo que te obliga a volver para probar el resto de platos. La cuenta fue una sorpresa, más económico de lo que nos imaginamos viendo que cada cosa era individual y altita de precio. Con botella de vino y postre, salimos a 28€ por persona.

ATMÓSFERA - 4/5 El restaurante es muy coqueto y tranquilo, perfecto para parejas. Tiene una planta inferior donde pueden comer grupos más grandes. Quizás le falla un poco la decoración, he estado en otros sitios de sushi mejor ambientados. COMIDA - 5/5 Alucinante. No tengo palabras. Llevaba tiempo sin ir a un restaurante donde de verdad disfrutase a este nivel de todos los platos. Descubrí unas combinaciones y sabores espectaculares. - Lo mejor: Me cuesta quedarme con un plato, pero si tengo que resaltar dos serían el Japo-Taco y el nigiri de anguila flambeada. - Lo menos bueno: No puedo decir nada negativo de ningún plato. ‍SERVICIO - 5/5 El personal era muy agradable y atento. Dejaos recomendar, todo plato que nos sugirieron estaba exquisito. PRECIO - 5/5 Ratio calidad/precio: 5/5 Ratio cantidad/precio: 5/5 Nos pasamos pidiendo, pero por 25€ cabeza comes muy bien. RESUMEN - 5/5 Restaurante al que sin duda volveré. Ha entrado en mi top5 de restaurantes en Madrid en cuanto a calidad precio se refiere. Todos los platos estaban exquisitos, el sitio era tranquilo y el personal era un encanto. Qué más se puede pedir?

Cena para dos estupenda. Pedimos un tartar de langostino tigre, las gyozas de rabo de toro, dos baos uno de socarrao de vieiras y otro de panceta asada a baja temperatura por último un roll de 8 piezas old bay Sanlucar y de postre dos mochis uno de fresa y otro de cheesecake. La cuenta fueron 71,5€. Muy buena relación calidad precio. Comida rica y con un servicio impecable. La única pega es que se olvidaron de poneros el aperitivo que ponían previo a la comida. Sin duda muy recomendado.

La atención recibida fue muy buena. La comida estuvo a la altura, destacando las gyozas de rabo de toro con crema de huevo y trufa. Quizá mejoraría el pan bao de panceta asada con kimchi. La puerta de la cocina está en constante movimiento y puede resultar algo molesto.Comida: 5/5

He acudido a cenar, con las altas expectativas por las críticas y la evaluación del restaurante, para celebrar una ocasión especial y ha resultado un poco decepcionante, sobre todo por el precio de los platos. El tartar de atún estaba como si lo hubieran picado en una picadora, lo cual hace no apreciar la calidad del pescado, estaba tremendamente desmenuzado y compactado y por ello su sabor tampoco ha estado a la altura. En cuanto a los baos el de vieira estaba roto cuando nos lo sirvieron y tenía poca cantidad de vieira se perdía totalmente entre los brotes y la mayonesa. Por otra parte en cuanto al de chipirón, la fritura super pesada, basta y aceitosa y complicado de comer acompañado de una hoja de lechuga con todo el tallo. Las gyozas de rabo de toro estaban correctas, el sabor del guiso era rico. Los niguiris de salmón flambeado con lima estaban buenos y el postre mochi de yuzu correcto pero y rico. No se si la eleccción de platos no ha sido correcta pero desde luego no estaba a la altura del precio. Y otro punto importante es que había mucha distancia de tiempo entre platos. Por todo ello, el balance no ha sido positivo y no ha cumplido con las expectativas.