Reseñas
Una de las pocas opciones veganas en Sevilla, especialmente para cenar quizá la única. El plato estrella sin duda los tres humus, obligatorio, muy originales y riquísimos. Las patatas con ajoaceite y guacamole muy recomendables, muy buena combinación. Nos decepcionó un poco el risotto del día, si volvemos pediremos tallarines o verduras cocinadas. De postres, el brownie vegano también excelente. Tras repetir, las demás opciones vegetarianas muy buenas, no ha decepcionado :
La experiencia ha sido magnífica en todos los aspectos. Tienen un montón de platos veganos, vegetarianos y también con carne o pescado, todos ecológicos. Pedimos el hummus, el revuelto de setas, la hamburguesa vegana y la tarta de queso de ricotta. Además, nos pusieron un pincho de cremita de coliflor y calabaza con sésamo muy cremoso. Todo estaba muy bueno. Como pequeñísima pega, no me gustó el sabor a canela o nuez moscada que tenía la hamburguesa, pero para gustos, colores. El hummus nos ha encantado. La hamburguesa es bastante grande. También trae patatas fritas, súper caseras. El restaurante tiene el ambiente perfecto. Las camareras no pueden ser más amables, recomendándonos en todo momento. La música inmejorable, variada y con muy buen gusto. Sin duda voy a volver. Recomendable totalmente.
Es un sitio muy agradable y apacible, con una buena decoración. Sencillo pero mágico. Una gran variedad de comida, vegana o para celíacos. Casi resulta complicado elegir qué comer para no pedir un plato de todo. Los platos están bien trabajados y con materia de calidad, lo cual es un gran punto a favor. Trato también de 10.
Muy buen servicio, me gusta el ambiente del lugar, música suave, decoración agradable al igual que el tipo de cliente que suele ir. Este restaurante aunque es vegetariano también sirve algo de carne. Para mí el plato estrella es la lubina y la pastela de pollo. No le doy las 5 estrellas porque las hamburguesas me horrorizaron de insípidas y malas que estaban, las probé de lo que pidieron los que venían conmigo y si hubiera sido el plato que elegí habría salido bastante enfadada. Soy una gran fan del falafel pero la hamburgesa de falafel tiene el peor falafel que he probado en mi vida... Un sitio un poco diferente en Sevilla. Pagamos unos 25-30€ por persona con varias bebidas, entrantes incluidos, quedamos satisfechos en cuanto a cantidad.
Un lugar muy acogedor y tranquilo muy diferente a todos los locales ruidosos de la zona, el restaurante está muy bien situado a poca distancia del centro de la ciudad de Sevilla y en zona de la Alfalfa que está plagada de bares y pubs donde existe una gran oferta de ocio nocturno y durante el día también es una zona visitable gracias a la cantidad de comercios y supermercados que hay cercanos. El restaurante tiene una oferta gastronómica muy buena y recomiendo encarecidamente antes de ir hacer reserva ya que a pesar de ser un restaurante grande con bastantes mesas suele llenarse a menudo y para no dar el paseo en balde mejor asegurarnos de que tendremos sitio. El local es muy amplio habiendo un buen espacio entre las mesas dando esa intimidad que a veces podemos buscar para una comida o cena especial , en todas las mesas encontramos aceites y vinagres de libre disposición para dar si queremos un toque diferente a nuestros platos , en las paredes del restaurante encontramos pizarras con la selección diaria de oferta gastronómica que nos oferta el negocio unos platos muy originales de gran calidad ya que en este lugar se utilizan materias primas de primer nivel destacando pescado o carne de agricultura ecológica que merecen la pena pagar además encontramos una amplia gama de productos vegetarianos y veganos e incluso nos invitan a dar a conocer cualquier alergia alimentaria para poder adaptar el plato que deseemos ya que todo se cocina al momento y no quiero dejar a un lado el pan, si si el PAN que merece mención también hay que probarlo sí o sí ya que es excelente, así que nos entregaron con una cocina de gran altura, platos riquísimos y muy trabajados tanto en sabor como presentación ya que la comida primero entra por los ojos!!! Con buenos precios ya que no es barato pero la calidad es excelente y es más que justificado que haya que pagarlo , excelentes las croquetas y el triplete de hummus. También un reconocimiento especial a personal de sala, al menos hablan tres idiomas y conciencia su producto de manera excelente dando un trato profesional en todo momento, visita obligada.
La comida siempre está deliciosa, con opciones bastante variadas, y para nosotros que somos veganos es uno de los pocos lugares que ofrecen postres. El servicio es sumamente atento y respetuoso.
Comida excepcional. El salmorejo de fresa y el ceviche son los mejores que he probado. Productos ecológicos con muchísimo sabor sin abusar de las especias. Los camareros son amabilísimos. Sólo le pondría una pega :un poco caro. De todas formas, viendo la calidad, el precio es razonable.
Vegan friendly, platos sin gluten, crudiveganos bienvenidos. Todo preparado de cocina de proximidad, casera y con mucho sabor y concepto Slow food. Porciones aceptables menos el hummus, 8€ por 3 brochetazos y sin pan para untarlo. Es bastante caro 10-12€ de media por plato. Hablan varios idiomas español, inglés y francés, al menos. Su carta cambia cada día, pero tienen una fija. Vale la pena probarlo porque todo está delicioso si eres del tipo perfil mente abierta, quieres experimentar nuevos sabores y te gusta la comida vegetariana y natural. El local tiene baño, no es bullicioso, no suele haber niños pequeños y hay bastantes mesas. ¡Recomendable para probarlo una vez en la vida como mínimo!
Lugar agradable, como muy tranquilo y apacible. Tal vez un poco oscuro a la hora de comer y con solazo en la calle. El trato maravilloso y la comida muy rica y creativa. Precio asequible.
He salido satisfecho y encantado de Fargo. Una relación calidad-precio acorde, una presentación en los platos que me ha hecho comerlos de otra manera y un trato de sus trabajadoras excelente que empezar preguntando por alergias y gustos como ellas no esté aún a la orden del día es para pensarlo. Ni qué decir de la limpieza del local, casi para comer en el suelo. Muy recomendable para grupos con carnívoros y veganos: ¡lo disfrutarás!