Reseñas
El restaurante es un espectáculo, no sólo por la vista de Toledo que es maravillosa, sino también por el trato, la calidad y elaboración de la comida y el ambiente selecto. He estado dos veces durante el periodo navideño y en ambas ocasiones he salido muy contento porque la comida es muy buena, para mí de lo mejor que he comido es el Wellington, no he comido uno así desde hace mucho tiempo. La carta de vinos es bastante extensa y el servicio estupendo. El precio va acorde a la calidad ofrecida y el servicio que prestan. Recomendable para celebraciones de poca gente, es un sitio pequeño y hay que reservar, pero con tiempo no es tarea imposible.
Reservamos para cenar y la verdad que sí no lo haces no tienes mesa me refiero a la terraza en interior lo desconozco pero con el buen trato que recibimos lo más probable es que volvamos y tengamos la ocasión de comer dentro. En lo que se refiere a los platos no hay queja, auténticos profesionales de la hostelería tanto en cocina como en servicio. Todo delicioso pero la tarta de queso fue lo mejor con un regusto a queso manchego qué la hace única.Sin duda una experiencia que invita a volver.
Primera vez que voy y ya quiero volver. El sitio me pareció excelente , buena decoración,buen ambiente con música en directo , buena iluminación y con unas vistas estupendas de Toledo. El personal fue encantador, en especial Aaron que estuvo muy atento con nosotros , fue muy simpático. De la comida solo decir que cuesta decidirse porque todos los platos tienen una pintaza.Nos decidimos por pedir de todo un poco y hacer una degustación entre los 6 amigos que fuimos.Todos deliciosos ! precios y cantidades acordes al sitio , repetiré.
De los mejores restaurantes que he probado... El servicio es de 10, desde que entras por la puerta hasta que sales!! Las vistas al casco de Toledo inmejorables, y la comida exquisita. Es verdad que pedimos demasiada comida y salimos muy llenos, quizá nos hubiera sobrado el hojaldre de pollo, que era muy pesado. Restaurante de precio elevado pero de calidad y sabores buenísimos, muy recomendable para ocasiones especiales!!!
Destaca extraordinariamente la calidad del producto que usan. El equipo muy profesional, agradable y atento para que todo estuviese a nuestro gusto. A parte de lo que aparece en la carta ofrecen platos fuera de carta. Las vistas de Toledo inmejorables. De todo lo que pedimos, el ravioli y el rodaballo lo mejor. El croissant de todo fue lo que menos nos conquistó. El precio es algo elevado, alrededor de unos 60 euros por comensal con vino, pero merece la pena.
Restaurante atractivo, especial y con encanto. Vistas espectaculares al Casco Histórico de Toledo, ya sea de día o de noche. Cuenta con una terraza exterior y un elegante restaurante interior. Trato educado y atento tanto por el metre como por los camareros. Carta confeccionada día a día con materia prima de primera calidad y una elaboración de primera. Platos generosos. Atmósfera tranquila y agradable. Postres abundantes. Muy recomendable
Hemos ido hoy a comer allí y la verdad ha sido una sorpresa muy grata! El personal y la atención muy buena y la comida riquísima! Calidad precio esta muy bien ya que para el tipo de platos es más barato que otros del mismo estilo y se come mejor.
MUY RECOMENDABLE. La verdad es que esperábamos mucho de este restaurante y no ha defraudado. La distribución es muy atractiva, la original decoración acompaña, con grandes ventanales que permiten la entrada de mucha luz natural y con unas vistas panorámicas de Toledo magníficas. Buen acompañamiento musical a un volumen correcto, en un ambiente tranquilo. Mesas perfectamente vestidas de tela. El servicio es realmente cordial, haciéndonos sentir cómodos en todo momento y bien aconsejados en cuanto a platos y cantidades. La carta no es muy amplia, pero realmente apetitosa y la calidad de los productos es incuestionable: Los entrantes, puerros y pulpo están realmente soberbios, con un punto y sabor espectacular, al igual que la lubina y la carrillera de jabalí. La presentación es muy atractiva y la calidad de la ejecución, sencillamente magnífica. Postres elaborados al instante: sobresalientes. El precio es elevado, acorde a la calidad del servicio y de las materias primas. Al dar finiquito a todas estas ricas viandas, percibimos un profundo sentimiento de satisfacción y de haber comido realmente bien, dando al traste con cualquier intento de dieta adelgazante.
Buena comida, buen servicio y unas maravillosas vistas de Toledo gracias a su ubicación en un enclave privilegiado. La atención fue muy buena desde el momento en el que entramos por la puerta. Relación calidad/precio acorde.
Hemos ido a este restaurante por recomendación, nos ha gustado bastante. Toda la comida de mucha calidad. Acorde a su precio menos el tomate, algo fuera de carta que nos propusieron, no sabíamos que su precio serían 17€, algo que vimos un poco exagerado puesto que no es un plato con mucha elaboración. Por lo demás todo muy bien, canelón y ravioli buenísimos. Croquetas de cabrales con mucho sabor y sin duda como postre nos quedamos con la tarta de queso. La atención excelente, camareros muy simpáticos y atentos en todo momento. Sin duda recomendaremos para ocasiones especiales.