Reseñas
Había leído muchas reseñas positivas y tenía altas expectativas de este sitio pero me defraudó. Las pantallas estaban apagadas, por lo que el ambiente que esperaba de vagón de tren no era como me había imaginado. Como punto positivo debo decir que la música era buena y el servicio agradable. Es una pena que estuviese así el bar con las pantallas apagadas porque podría ser un sitio muy guay y diferente para tomar algo.
Antro de categoría. Situado en Malasaña, es un bar temático para ir al barro. Prepárate porque la ventilación no funciona muy bien y hace un calor considerable. Sumado a los olores del personal se produce una combustión bastante curiosa. Nada que no sea subsanable. Con un par de copas, a buen precio, y con la excelente música que ponen, se olvida rápido. Ambientado en el interior de un tren de pasajeros de época, puedes disfrutar en barra o sentado de unas copas con amigos muy interesantes.
Un bar con decoración muy chula, de madera, y un estilo retro con objetos por las paredes como maletas de cuero, libros colgados, instrumentos antiguos... Tiene también las típicas cortinas de terciopelo. La barra es como la de los antiguos pubs. Tienen cervezas variadas, con las que te ponen patatas o palomitas. Y lo único malo, es que para ir a los baños hay que pasar por delante del escenario, tapando la visión de la gente que está sentada, y en el que normalmente hay algún espectáculo. Es un pasillo estrecho y el escenario es pequeñito, por lo que al pasar te quedarías en todo el medio. Mejorando este aspecto, sería un lugar genial y súper cómodo. Por lo demás, los espectáculos son amenos.
Una pasada de sitio para tomar unas copas, muy bonito, buenas copas y aperitivos.
Un buen lugar para tomar una copa, tranquilo y con un buen ambiente. Los camareros atentos. Recomendable!
La decoración es genial. Aprovecha la forma alargada del local para hacerlo parecer al interior de un tren. Los asientos están enfrentados y con una mesa en el medio a la manera de un tren de lujo. A un lado de cada pareja de asientos se proyecta una filmación continua de un paisaje en movimiento, simulando una ventana. No es barato en absoluto, pero bonito bonito.
Un sitio peculiar que te lleva a otro espacio-tiempo y no sólo por el hecho de que el bar simula estar dentro de un tren en movimiento. Buena variedad de Vodkas y Ginebras. Copas de calidad. Precio por encima de la media no es para más de dos copas. Camareros muy amables y atentos. Un sitio molón.
Ha ido a peor, y fue un gran Pub. Ya lo último, que para captar clientes te ponen un cartel en la puerta " Hora feliz hasta las 23.00h" y es mentira. La hora feliz siempre tradicionalmente se ha caracterizado por ofrecerte un 2x1 o la copa a mitad de precio. Aquí sin embargo lo anuncian como tal y lo que hacen es bajarla algo de precio, la copa a 5 euros. Marcas de importación excluidas. Pero no una hora feliz como siempre se ha entendido. Unido a que cada vez tiene menos afluencia han hecho que decayera el sitio. Una decepción.
Aunque los precios den miedo, es bastante bastante caro, la decoración es genial y es que imita e vagón de un ferrocarril. Si te gusta genial si no, mejor no pierdas el tiempo porque es estrecho y alargado y como esta muy lleno, puede llegar a agobiar. Esta muy de moda ahora porque es de los antiguos dueños de The Wall.
Nosotros fuimos de copas y nos pareció un bar de lo más agradable. Hay que pasar de largo la barra para llegar a la zona donde están los "vagones" del tren que simula ser The Passenger. Con un paisaje proyectado en "ventanas" parece que estás de viaje tomándote un copazo... pero de viaje antiguo, como en el tren de la fresa. Las copas no nos parecieron excesivamente caras así que ¡perfecto!