Reseñas
Mejor de lo esperado. La comida de alta calidad, bien elaborada y con conocimiento. El trato perfecto, conocen su producto y se ve que lo adoran. El postre de chocolate es una gran experiencia. Recomendable 100% un restaurante único!
No sé por dónde empezar... Llegamos y nos llamó la atención que ningún camarero llevase mascarilla, cosa que no se entiende muy bien. Al venir a tomarnos nota se sientan contigo, sí se sientan poco serio La comida, bien, estaba rica. Pero al acabar de cenar, el dueño selecciono algunas mesas en su mayoría parejas jóvenes para darles una "sorpresa" la cual constaba de varios pasos. Nos negamos hacer uno de ellos y el chico nos invitó a que dejásemos de participar en dicho proceso. Lo siento pero no pienso hacer algo que ni quiero, ni me gusta, ni hice jamás. No solamente no volveré sino que no recomendaré ir a nadie
Decir que este es uno de los mejores sitios que he comido se queda bastante corto, porque en todo sentido es una experiencia bastante única. Desde que entras, el dueño te hace sentir cómo en su casa y cualquier duda que uno pueda tener, te la explica detenida y detalladamente, se nota que es un hombre que conoce a la perfección cada uno de sus platos, además que su trato es inmejorable. La comida también es algo que está a un nivel espectacular, tanto el tataki y el magret estaban espectaculares, es sin duda de los mejores platos que he comido. Pocas veces me he quedado con la memoria de un local, comida y servicio tan marcados cómo aquí, bravo.
Muy buena la comida, espectacular el servicio con sus explicaciones de cada plato, todo natural y hand made y explosivo el final de fiesta!
Ir a este restaurante es ir a conocer, descubrir y saborear una experiencia sin estar a un restaurante desorbitante. Su carta de comida no es muy variada ellos mismos dicen que se centran en carnes y quesos, acompañados de vinos orgánicos. Hay que decir que esta carta no supone ningún problema, te atienden de una forma muy cercana y personal, así que si hay que añadir alguna cosa, o quitarla, no hay problema. Quiero enfatizar que fue la primera vez que, hice una comido acompañada de vino, en vez de agua. Fue la primera vez que me atendieron para conocer el vino y comprender sus distintas formas de ser creado y no de "endiñarme" cualquier copa.
Fuimos y nos sorprendió con platos increíbles y una selección de vinos espectaculares. Todo de primera calidad, natural y cuidadosamente seleccionado. Atendido por sus dueños que hacen que sea una experiencia única.
En cuanto tenga la ocasión de ir con alguien que aún no conoce el restaurante volveré. No soy una fan ni del vino ni tampoco de la comida francesa, pero el buen trato del camarero y dueño del restaurante hace que la experiencia sea única. La primera vez que probé vino natural, no es mi bebida favorita pero por lo menos me gustó, cosa que no había conseguido en años. La comida de calidad inigualable. La "sorpresa" del postre ya borda la experiencia.
Fuimos un grupo de amigos a comer. Comida correcta, trato excelente. Por mi parte, lo único con lo que no acertamos fue con los vinos. Demasiados dulces para mi gusto. Nos explicaron que eran totalmente naturales. Cada plato principal como mucho es para 2 personas. Y postres solamente tienen 2. Hay una sorpresa al final de la comida en la que el dueño la verdad que es esmera mucho.
Un restaurante francés diferente. Productos de calidad sencillos, escogidos. Un ambiente muy desenfadado con una atención directa por los dueños. Los vinos todos de cultivo y producción natural. Probamos un vino de Alsacia excelente de gran calidad y muchos matices. Un restaurante a descubrir.
De las mejores experiencias gastronómicas de mi vida. Enhorabuena a los dueños por este gran restaurante. Repetiré muy pronto para traer a mis amig@s. Toda palabra se queda corta. Animo a todo el mundo a venir y vivirlo de primera mano. Os aseguro que no os arrepentiréis.