Hotel Exe Moncloa

Hotel con ubicación estupenda. Justo en frente de parada de metro. Habitación amplia con todo lo necesario para pasar unos días. Desayuno buffet muy completo. La única valoración negativa serian dos: Puerta de cuarto de baño con mucho ruido y lo peor 1 de los tres ascensores del hotel la mayor parte del puente estropeado, con lo cual es una odisea subir o bajar sin colas.

La habitación que me tocó estaba genial, era grande y cómoda. Tenía tetera con artículos para su uso además de dos botellas de agua diarias. La temperatura en el hotel era cálida, se agradecía porque fuera había -5°C. Lo que no me gustó tanto fue el bufé de desayuno, la variedad era la habitual y buena calidad, pero la tostadora tardaba mucho en tostar y la leche caliente de la máquina salía fria. El espacio es pequeño y para 6 estábamos encajonados en una mesa de la que dos personas no podían salir sin levantar al resto. El hotel nada puede hacer porque es el espacio que tienen, pero fue un poco incómodo. El personal maravilloso.

He repetido este año porque está en un sitio estupendo, pegado a la boca de metro y con bastante ambiente. Se descansa bien, el buffet no es muy variado pero merece la pena coger el desayuno. Le quito dos estrellas porque la televisión estaba rota y hemos visto el mundial a rayas, y porque olvidamos una cosa en el hotel y se han negado a enviarla bajo nuestro coste y responsabilidad. No obstante, lo recomiendo y volveré

Bien ubicado, habitación correcta, buen servicio, como pega diría que el muro de la ducha es algo escaso y salpica el agua fuera, aunque esto pasa en muchos sitios y como punto a favor, el que tengan una plancha y una tabla por si se necesita. Buen desayuno que empiezan a servir a las 7:00. Habitaciones: Habitación correcta, sin ser de gran amplitud, me pareció suficiente Seguridad: Al igual que en la mayoría de hoteles, dispone de caja de seguridad en la habitación

Me alojé en una tercera planta y era imposible descansar por el ruido tan grande que había y ya que daba a una zona de discoteca y eso era toda la noche sin poder dormir . Hay otra zona que da a la avenida principal " carretera " , ahí no se como será de ruidos pero pienso que las habitaciones no están bien insonorizadas o al menos la nuestra y se debe de escuchar el ruido de los coches en las plantas bajas .

La ubicación. La limpieza impecable. Las personas de recepción amables y con una sonrisa. La habitación espaciosa y todo al detalle. El precio acorde a lo que ofrecen. Cada vez que viajemos a Madrid ya tenemos sitio.

Vamos por lo bueno primero, la atención de este lugar, los amenities y la ubicación son muy buenas. Vamos, lo importante va bien. Ahora, la habitación que me tocó fue la habitación de hotel más abarrotada y insultante del Feng shui que vi en la vida, con una columna en medio y una cama doble que estaba tan mal puesta que era imposible llegar al lado izquierdo donde estaba el único enchufe para cargar el móvil sin pasar por encima de ella. Ojalá se hubieran adecuado al tamaño de la habitación y colocado una cama simple, hubiera solucionado bastante de los problemas...

El hotel genial, el personal también. Falta que quiten la bañera y pongan ducha. Por lo menos en la habitación que nos tocó Tenía una terraza impresionante.

Buen trato. Pero por ser de 4**** hay detalles raros. Si la habitación da a la calle principal será difícil dormir. El WC no tenia escobilla, lo siento por la persona que haya tenido que limpiar mi gastroenteritis.

Hotel de 4 estrellas que desde mi forma de valorar las estancias, me decepcionó en muchos aspectos y tiene unos precios desorbitados para el servicio que ofrece. Llegamos un sábado a las 11:30 a.m con el tiempo muy ajustado y nos informaron que la habitación no estaba disponible hasta las 14:00, cosa que no nos importó porque íbamos a un Congreso pero nos extrañó mucho porque si te hacen abandonar el hotel a las 12:00 del día siguiente, lo lógico es que puedas entrar a la misma hora del día anterior. No, el hotel había que abandonarlo a las 12:00 del día siguiente. Más o menos discutible pero el colmo es que la familia que aparcó con nosotras a la misma hora sí tenía la habitación preparada. Agradecería me explicaran esa distinción. Otro aspecto que no nos gustó: cuando un hotel de 4 estrellas no te puede ofrecer un parking, te suelen dar la dirección del parking privado con el que tienen convenio, una va directa allí y después va a su hotel. Ellos no, tienes que hacer el check in y luego te mandan al parking que por supuesto te cobran. No te llevan tampoco el coche al parking. Respecto al parking conveniado por 18 euros al día, es un absoluto horror, si tu coche es un poco grande olvida aparcar allí. Al personal de recepción no se les siente cómodos, la atención nos resultó la de unos trabajadores muy exhaustos y en malas condiciones. Habitaciones: Confortables y modernas pero absolutamente carentes de estilo y calidez alguna, los muebles son como una exposición de una tienda de Ikea en más usados. Nuestra habitación daba a un bloque de pisos por lo cual intimidad cero. El baño bastante bien aunque no era muy grande y tenía bañera. También está enfrente de la boca de un metro, aspecto positivo. Por la noche, muchísimo ruido del exterior a pesar de estar en la 7 planta, como si fuera una zona de marcha. No repito.